Europa se encuentra cada vez más afectada por olas de calor y devastadores incendios forestales, generando graves daños económicos en países como Grecia y España. Los científicos predicen que estos fenómenos meteorológicos extremos serán más frecuentes en el futuro debido al rápido calentamiento de la región alrededor del mar Mediterráneo.
En 2022, los incendios destruyeron un área equivalente a Montenegro, mientras que en Grecia, la ola de calor en julio fue la más larga registrada en la historia, afectando más de 50,000 hectáreas. Los daños ascienden a miles de millones de euros, afectando negativamente la economía y el turismo.
El turismo, especialmente en países como Grecia, España e Italia, enfrenta un impacto significativo debido al calor y los incendios forestales. El sector turístico es esencial para la economía de estas naciones, pero la pérdida de atractivo de las regiones costeras debido al calor podría cambiar la preferencia de los turistas hacia destinos más septentrionales.
Aunque algunos expertos sugieren enfoques innovadores, como un turismo más sostenible y participativo, el aumento de la frecuencia de estos fenómenos requiere una mayor conciencia y medidas preventivas en toda Europa para proteger la industria turística y los ecosistemas.