La cantante Shakira se encuentra nuevamente en el centro de la polémica con la apertura de una segunda causa por presunto fraude fiscal en el IRPF y el impuesto de patrimonio del año 2018. Estos nuevos cargos se suman a los que enfrentará el próximo 20 de noviembre en la Audiencia de Barcelona, donde será juzgada por presunta evasión fiscal entre 2012 y 2014.
La Fiscalía acusa a Shakira de haber defraudado 14,5 millones de euros durante los años mencionados, al simular que no residía en España. La artista devolvió la suma defraudada más intereses, pero podría enfrentar hasta seis delitos en total, con una pena solicitada de ocho años y dos meses de prisión, además de una multa de 23,8 millones de euros.
Aunque Shakira ha mantenido su inocencia y negado haber sido residente permanente en España antes de 2015, las autoridades fiscales continúan su investigación. La cantante, que reside actualmente en Miami con sus hijos, enfrenta un complejo escenario fiscal mientras se mantiene activa en su carrera profesional y se prepara para el lanzamiento de su próximo disco.